Girona ha puesto en marcha la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) con restricciones blandas que afectan sobre todo a los vehículos sin etiqueta ambiental y que son de fuera de la ciudad. A partir de ahora, si no están incluidos en alguna de las exenciones, sólo podrán circular 24 días por año dentro del perímetro, que se extiende desde La Devesa a Emili Grahit, y desde la calle del Carme y el Barri Vell hasta la Frontissa del Güell.
El concejal de Movilidad, Isaac Sanchez, ha explicado que la ciudad «no tiene problemas graves de emisiones contaminantes», lo que ha favorecido que las restricciones sean más laxas, pero ha destacado que la ZBE «es una herramienta que permitirá reducir las emisiones contaminantes que generan los vehículos, y ayudará a la gente a tomar conciencia de que de a poco tienen que renovar los coches más viejos». Se prevé que en el primer año de vigencia las emisiones de CO₂ se reduzcan en un 6,9%.
En el perímetro de la ZBE, las restricciones se aplicarán de lunes a viernes entre las siete de la mañana y las ocho de la tarde. Fuera de este horario, no habrá limitaciones para circular dentro de la ZBE. En el caso de la ciudad, los vehículos que se verán más afectados son los que no tienen etiqueta ambiental y sean de fuera de Girona. Todos aquellos que tengan distintivo (B, C, ECO y 0) pueden circular, estén domiciliados o no en la ciudad.
Concretamente, el concejal de Movilidad ha subrayado que, en el caso de los vehículos que tengan etiqueta ambiental, no es necesario que lleven el distintivo pegado en el parabrisas porque las cámaras de control captan las matrículas de los vehículos y, directamente, las cuadran con la información del sistema para saber si pueden entrar o no dentro de la ZBE. Por otro lado, aquellos coches que no tengan etiqueta ambiental y sean de fuera de la ciudad, podrán circular un máximo de 24 días por año dentro de la Zona de Bajas Emisiones. En estos casos, ha precisado Sanchez, en un mismo día podrán entrar y salir varias veces si así lo necesitan.
La normativa de la ZBE también se permite que aquellos vehículos sin etiqueta ambiental que estén domiciliados en Girona antes de finales de diciembre de 2024, y quienes se hayan acogido a alguna de las exenciones, también puedan circular por dentro de la ZBE. En este último caso, eso sí, se debe solicitar una autorización para el registro. Entre otras, las exenciones hacen referencia a motivos laborales o bien a vehículos de emergencia, médicos y de seguridad.
Multas de 200 euros
En cuanto a las sanciones que se aplicarán a aquellos vehículos que incumplan la restricción, el concejal de Movilidad ha precisado que las multas serán de 200 euros, con un descuento del 50% si se pagan dentro de los primeros quince días. Sanchez también ha explicado que los propietarios de vehículos sin etiqueta y que son de fuera de la ciudad no es necesario que pidan autorización para entrar un máximo de 24 veces al año dentro de la ZBE, y que el mismo sistema, si así lo quieren, también les permitirá consultar cuántas veces han entrado.
